Tras la Semana Santa, como es tradicional, se abrieron las puertas del centenario coso egabrense la tarde del Sábado Santo, antaño Sábado de Gloria, para ofrecer un atractivo cartel. A la postre todo se fue al traste por la manifiesta endeblez de los pupilos de "La Palmosilla". Toros descastados, sin fuerza, bajos de raza, de comportamiento cansino y lo que es peor carentes de transmitir nada. ¿Cuando vamos a ver un toro de verdad en las plazas cordobesas? Por que la cosa esta clara, si falla el toro, todo lo demás se cae por su propio peso y la fiesta de toros no esta para muchos tambaleos, puesto que si resiste los envites externos, lease antitaurinos, los que le vienen desde su interior son mas dificiles de sobrellevar y son muchos más dañinos.
La esperanza es que si el toro-toro, el toro total de los tres tercios, vuelve a asomar la cabeza por la puerta de toriles, ganaremos todos y con nosotros la fiesta misma.
Espero que mi amigo Julio, embarque para el domingo seis toros de verdad.
Esto no esta muerto; Córdoba es un pueblo que duerme (Pio Baroja)
A que le llamas toros de verdad, a toros grandes altos y con muchos pitones? o a toros armonicos con trapio y enseñando las puntas.
ResponderEliminarPor que no dudes que tu amigo Julio va a embarcar un corridon de toros, con algun que otro cinqueño y baratita para que la empresa no pierda mucho y la cruz blanca tampoco.
El toro de verdad es aquel que guarda su morfología acorde a su encaste, que esta limpio de pitones y que tiene la casta suficiente para dar juego en los tres tercios.
ResponderEliminarEn segundo lugar la corrida del domingo, no la paga la empresa, la abona los amigos de la Cruz Blanca.
Con una poca de suerte, mañana colgaré fotos de algunos de los que pueden venir, puesto que mañana va la autoridad al campo y mas o menos, Julio ya habrá visto lo que va a mandar.
Perfecto, esperemos que embistan.
ResponderEliminarSeria interesante lo de las fotos.