Estos días navideños dan mucho tiempo libre. Sin lugar a duda, cuando el tiempo no es apacible, me decanto por la lectura. En el último libro revista de Tierras Taurinas, dedicado a la ganadería de Pablo Romero, leo lo que José Luis de Pablo-Romero y Artoloitia le dijo a Alfonso Navalón:
" ¡El día en que el afeitado sea legal, cortaremos los pitones más que cualquiera ! Mientras tanto, el hacerlo equivale a deshonrarse. ¡ Y que no me hablen los taurinos de "humanizar" ! Ya que el fondo del problema no es más que una cuestión de dinero. Todo se hace por dinero. No para proteger al torero, sino para proteger el dinero que puede hacerles ganar. "
Igualito, igualito que hoy. La unica diferencia radica es que hoy nadie lo reconoce y encima transigen. Para el verdadero ganadero, ya lo dijo Pablo-Romero, toda una deshonra.
Una vergüenza! El desonor que anuncia la fin de la corrida.
ResponderEliminarAcabaré por tener vergüenza de mi profunda aficion, hasta que venga a ser : ANTI !