9/30/2006

TODO UN DESPROPOSITO

Poco esta haciendo la empresa Taurotoro por hacer que la afición vuelva al Coso de los Califas. La novillada que se presupone cierre la temporada en Córdoba -la corrida que aún queda no creemos que se celebre- ha sido un autentico cumulo de despropositos, desde su concepción hasta su final. Todo se ha desarrollado de una forma tan descabellada que podría servir de inspiración para el guión de una pelicula surrealista. De entrada hay que decir que el cartel ya nacio gafado, el primer espada -Pérez Mota- era herido, lo que le impedia actuar en Córdoba. Se le buscó sustituto y asunto solucionado, aunque lo que realmente no tenia solución era la fecha y la hora de la celebración del festejo. En día laborable, a las ocho de la tarde y sin la debida publicidad ¿quien iba a asistir a un espectaculo tan pobre en su concepción? Menos de un cuarto de plaza, no fueron ni los propietarios. El desproposito comenzaba a consumarse.
Pero para que todo terminara de enredarse, hete ahí, que el primer novillo hiere de consideración al segundo espada en el tercio de quites. Una cornada en la cara posterior del muslo que necesita de intervención quirurgica. El orden de la lídia se altera, todos pensamos que la cosa queda en mano a mano entre los dos cordobeses, pero surge el segundo desproposito que no es otro que Javier González sale a matar sus dos novillos, visiblemente mermado de facultades con el asentimiento del equipo médico y lo que es peor del delegado gubernativo. Gracias a Dios que no sucedió nada, si no ¿a quien habia que haber pedido responsabilidades?
Luego la tarde noche de despropositos continuó en el redondel, convertido en capeas de plaza de carros. ¡Que lidias mas espantosas! Capotazos sin ton ni son, banderilleros mal colocados, picadores que no eran capaces de dominar a sus cabalgaduras, una puya que se desprende de la vara, el picador que mete dos cuartas de palo en el boquete del puyazo anterior, un ventilador envuelto por un plastico en un palco vip funcionando toda la noche....Menos mal que "El Punti", uno de los pocos que mantuvo su sitio, nos evito que salieran los cabestros que era el número que faltaba. El desproposito seguia creciendo.
De los toreros poca cosa. Curro Jiménez que lleva muchos años en esto, se le vió sin oficio mucho destorear y acompañar las embestidas, arranco una oreja a base de tesón ante un manso. Javier González no debió de salir de la enfermeria y Solano González sigue con su ilusión, su voluntad y sus ganas de agradar, pero poco mas. Tuvo el mejor novillo de la noche, el mas propicio para reivindicarse, pero su falta de oficio no se lo permitió. Solo al final, tras un sin fin de pases sin alma, se dió cuenta de donde debia de colocarse y lo que debia de hacer, pero ya era demasiado tarde. El desproposito llega a su fin, porque estas lineas no quieren ser eso un desproposito.

9/28/2006

BROCHE DE LATON

¡Que pena! Atrás quedaron los años en los que Córdoba era una plaza de solvente prestigio y todo lo que acontecia en su ruedo tenia una gran repercusión en el panorama taurino nacional. Atras quedaron las etapas doradas en el tiempo. El post romanticismo del primer Califa; aquel monarca absoluto del toreo que fue Rafael Guerra; Machaquito el que mataba los toros en corto y por derecho; la quietud pasmosa de Manolete; los que le sucedieron al Monstruo con honor, caso de Martorell, Calerito y otros hasta llegar a la revolución de "El Cordobés" que tuvo su punto contrapuesto en el estilismo de Manuel Cano "El Pireo" y su complemento con la verdad de Gabriel de la Haba "Zurito".
Luego todo se languideció. Córdoba, se apagó hasta que en los albores de los ochenta surgió la figura de Finito. Córdoba se desperezó de nuevo. Córdoba, volvió a ser lo que siempre habia sido que no es nada mas que referente en el mundo del toro. Luego, la falta de ambición del nuevo idolo, hizo que la afición se volviese de espaldas al toro. Finito les defraudó. Lo que iba para nuevo Califato quedó en un buen torero al que su abulia y conformismo, no permitió reverdecer viejos laureles. Todo quedo difuminado y la moral de la afición seriamente dañada.
Hoy Córdoba, no dormita. Córdoba se muere. La gente no acude a la plaza, antes de temporada, hoy redudica a un triste ciclo que también se ha muerto al coincidir con la voragine "sanisidril". Para colmo, algunos están acelerando el proceso. No es de recibo que se cierre la temporada con una novillada de tan pobre cartel y no es que queramos cercenar la cabeza de dos chicos de la tierra que quieren ser toreros. Córdoba y su historia, no merecen este cierre de latón.
Esto se muere. No hay referentes que ilusionen a la afición a volver al ruedo, ya que se siente engañada tarde tras tarde, renegando incluso de su pasado.
La esperanza nos hara seguir acudiendo al coso de Los Califas, pero el enfermo, esta muy grave, por no reiterar que se muere y esta vez de verdad.

9/24/2006

José Luis Moreno o el toreo eterno.

En el mundo del toro, hay muchas injusticias y una de las mayores, es el cómo está planteado en la actualidad el tema de contrataciones y actuaciones. Hoy, los toreros, prácticamente parten a principio de temporada con muchos contratos cerrados, lo que permite a muchos relajarse, pues pase lo que pase, siempre van a tener tardes para torear. Otros toreros sin embargo, hagan lo que hagan en el ruedo, siempre ven como por muy rotundas que sean sus actuaciones, las mismas no tienen la recompensa deseada, viendo como pasan las fechas sin ver un pitón si quiera de lejos. Lo más grave, es que entre estos últimos toreros, los hay que saben hacer y decir el toreo mejor que muchos de torean a diario, pero que no son realmente valorados por las empresas.
Este caso es el de José Luis Moreno, torero que hace unas temporadas prometía muy y mucho con su toreo de manos bajas, pero que la espada y otros contratiempos le privaron de ocupar en el escalafón el lugar que verdaderamente le corresponde. Pero decir que José Luis Moreno, no ha cambiado a lo que hay que agregar que ha madurado como torero y aquel torero de principio de los años noventa, es hoy por hoy, uno de los pocos toreros que torea muy de verdad, haciendo el toreo de toda la vida, puro y rotundo. El toreo eterno.
Lo acontecido el otro día en Pozoblanco, no viene si no a ratificar, que Moreno no es un torero recuperable, es un torero que merece mejor trato por parte de las empresas que le deben de contratar mas asiduamente. Lo demás ya corre de cuenta del torero cordobés.
La lección de toreo que brindó José Luis Moreno en el primer toro, es un compendio de la tauromaquia. De salida se fajó con su oponente con unos lances mecidos y templados que corroboró con un quite a la verónica de calidad. Ante un toro mentiroso de esos que tienen mucho que torear, no por su bravura encastada, sino por su falta de fuerza, su querer a medias y sobre todo por lo cambiante en sus reacciones, Moreno ratificó que esta en sazón o lo que es lo mismo, en un gran momento. Faena desde primera hora muy firme, enseñando al toro quien mandaba en el ruedo, para proseguir con tandas muy poderosas por el pitón derecho, perfectamente colocado y lo que es más importante haciendo el toreo de siempre, cruzado, rematando los pases siempre hacia atrás y por debajo de la pala del pitón, concluyendo las tandas con pases de pecho al hombro contrario. La verdad del toreo se vió en la plaza de Pozoblanco, vamos a ver si con esa verdad, Moreno remonta el vuelo hacia el lugar donde realmente le corresponde que no es otro que el de los privilegiados y más ahora cuando hay tanta mentira en el toreo.

Córdoba taurina

Córdoba ha escrito en el transcurso de los tiempos, páginas de oro en la tauromaquia. Es por lo que desde este espacio, vamos a tratar de poner en valor, una ciudad que hoy por diversas causas, empresas, coincidencia de fechas con San Isidro, indiosindrasica particular de su afición y otras mas, pasa por una de las etapas más oscuras dentro del mundo del toreo.
Córdoba debe de reeditar su importancia en el panorama taurino y no deber de obcecarse por vivir del un Califato taurino añejo y pasado, cuando no artificioso y politizado.
Desde aqui vamos a tratar de reevindicar a la Córdoba taurina, exaltarla en su historia, ya escrita, así como intentar que como el Ave Fenix, resurga de sus propia cenizas.
Sus toreros, sus ganaderias y sus nuevos valores son sus actuales credenciales.
Córdoba, parece muerta, pero no es así, algo se mueve.