Esta tarde me llamó mi buen amigo Víctor Molino. Me pidió que formase parte de un 'sanedrín' en su programa radiofónico "El Paseillo". El objeto no era otro, que tratar de la más que posible ausencia de JT de la feria de Córdoba. Una vez en antena y cambiando impresiones con ese siempre joven, Rafael Salinas, se llega a la conclusión que el posible sustituto tiene que ser un autentico figurón del torero, y que además haya salido reforzado de la recién acabada feria abrileña hispalense. Todo el mundo piensa en Julián López El Juli". El madrileño era una de las ausencias mas añoradas por los aficionados. Su actuación en Sevilla lo hace ahora ser más deseado aún. Su apoderado seguro que de aceptar la sustitución, a nadie apetece servir de sustituto cuando no ha habido acuerdo en principio, pedirá a la empresa el mismo dinero que JT, por lo que la negociación con el de Velilla de San Antonio y su apoderado, Roberto Domínguez, se antoja compleja y larga.
De pronto se me viene a la mente el nombre de Morante. Toreramente hablando es la antítesis de JT. El de Galapagar es quietud, verticalidad, dramatismo. El sevillano es inspiración, gracia, alegría. El de la Puebla también se echaba en falta por los aficionados, por lo que su presencia no sería mal vista. Su toreo gusta a los aficionados más ortodoxos, y a los nuevos seguidores de la fiesta. Al igual que Tomás, la incógnita esta flotando hasta que acaba el festejo. Me inclino por Morante. Su actuación en Sevilla, donde se le idolatra pero se le exige más que a nadie, ha sido si no rotunda, si importante. En su último toro de la feria, se dejó atrás los 'duendes' y se la jugo con mucha verdad. En caso de que JT no pudiese actuar en Córdoba, como así parece, ¿porque no Morante?
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