5/29/2017

LA FRANCESA LEA VICENS ABRE LA PUERTA DE LOS CALIFAS EN EL CIERRE DE LA FERIA


La rejoneadora brilla con una monta perfecta y Hermoso de Mendoza deja los mejores pasajes de toreo sobre el albero.

Se abrió la puerta califal por segunda vez en esta exigua feria. Una feria que, a pesar de ello, no pasará a la historia. Solo será recordada por ser la que se celebró el año que se conmemoraba el centenario del nacimiento de Manolete y poco más. Las hojas de la Puerta de Los Califas se abrieron de hecho, en el festejo de rejones que ponía broche a la feria, de forma poco acorde a lo que se debe de exigir en una plaza no ya sólo de primera categoría sino de cualquier coso que pretender tener un prestigio.

Los festejos de rejones han sufrido, al igual que las corridas de a pie, una homogeneización que le resta emociones y diversidad. Todo se hace muy previsible. Incluso se ha buscado un animal propicio para ello. El encaste murube-urquijo copa un alto por ciento de este tipo de festejos, en detrimento de otros. El público también ha cambiado susceptiblemente. Si antes se valoraba lo que se hacía ante el toro, hoy solo se valora la puesta a punto de los corceles, así como la doma. Con ello, son más valorado los ejercicios de alta escuela que el toreo propiamente dicho. Este tipo de corridas podrían a pasar a llamarse en breve corridas de arte ecuestre en lugar de arte de rejoneo, o de toreo a caballo.

Lea Vicens se metió al público en el bolsillo por lo ya apuntado. Su grácil figura femenina, caer sobre la silla de montar con empaque, cabalgar a las mil maravillas y tener una cuadra muy puesta a punto fueron sus avales para triunfar ayer en Córdoba. Pero torear toreó poco. Sus labores en sus dos toros tuvieron la misma tónica. Buena monta, gestos a la galería y muchas imprecisiones. Tantas que los quiebros resultaron despegados, los embroques la mayoría a la grupa. A la hora de clavar los rehiletes, estos caían en cualquier lugar de la anatomía de los bureles. Aún así, el público se le entregó de principio a fin y ello, unido a un eficaz uso de los aceros, hizo que en su hoja de servicios figure que en 2017 abrió la Puerta de los Califas de Córdoba.

Joao Moura guarda el concepto del rejoneo de Portugal. Esto no es otra cosa que colocarse siempre muy enfrontilado con los toros. Dejarse ver para luego intentar siempre clavar al estribo. El joven Moura lo intentó con desigual éxito. Algunas veces le salió y otras no. No obstante, su labor tuvo cierto poso. Al menos en las formas, aunque en ocasiones faltase serenidad. Mucho mejor en su primero, al que cortó una oreja, donde brilló en banderillas aunque sin acabar de rematar.

En su segundo lo volvió a intentar, pero ya las cosas no le salieron como hubiera deseado. Fallón a la hora de clavar, su labor resulto demasiado irregular. Aún así, debido a la buena monta y a los atisbos de toreo cabalgando de costado, pudo obtener otro trofeo, pero tras clavar medio rejón trasero, el toro tardó en doblar, lo que hizo que los tendidos perdieran receptividad a lo realizado por el jinete lusitano.

Pablo Hermoso de Mendoza estuvo en su línea habitual. Del estellés salió lo mejor, en cuanto a toreo, de la tarde. Eso, unido a su magisterio ante los toros, en la práctica del rejoneo tradicional, hizo que lo más destacado partiera de sus manos. Sabio en la elección de terrenos, sus auxiliadores a penas participaron en la lidia de sus dos toros. Del mismo modo, su concepto clásico y ortodoxo hizo las delicias del respetable, tanto en preparación como en ejecución. Sus dos faenas tuvieron el mismo denominador común. Sólo el uso de los aceros le privaron de haber triunfado de forma rotunda. Destacar igualmente su cuadra. Caballos preparados de forma conciezuda y eficaz, donde año tras año presenta en los ruedos nuevas monturas que siempre están a la altura de lo que se espera de una de las máximas figuras del rejoneo contemporáneo. No hay que obviar que Pablo Hermoso de Mendoza ha sido quien ha sentado las bases del rejoneo que se practica en nuestro tiempo.


PLAZA DE TOROS LOS CALIFAS DE CORDOBA
Ganadería: Seis toros de Luis Terrón, reglamentariamente despuntados, bien presentados y de buen juego para la práctica del rejoneo.
REJONEADORES: PABLO HERMOSO DE MENDOZA, silencio y ovación con saludos. JOAO MOURA oreja y ovación con saludos. LEA VICENS, vuelta y dos orejas.
INCIDENCIAS: Plaza de Toros de Los Califas. 4º y último festejo del abono de la feria de Nuestra Señora de la Salud. Un cuarto de plaza en tarde de temperatura agradable. Al finalizar el festejo Lea Vicens abandonó el coso a hombros por la Puerta de Los Califas.

Foto: FIT

El Día de Córdoba (29/05/2017)


No hay comentarios: